Cada vez que entramos en una tienda, sea de la especialidad que
sea, estamos expuestos a continuas tentaciones que nos incitan a comprar. Vamos
al supermercado con una lista hecha y es difícil salir del establecimiento
habiendo comprado únicamente lo que teníamos anotado. Siempre encontramos algo
que no teníamos pensado adquirir, y al final, acaba formando parte de nuestra
compra, muchas veces sin quererlo. Así, expuestos a tantas tentaciones vayamos
a donde vayamos, el hecho de ahorrar se complica mucho. Sin embargo, sí podemos
tomárnoslo en serio y tener en cuenta algunos trucos, para conseguir un ahorro,
por mínimo que sea.
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Cómo ahorrar cuando
salimos de compras
Aunque estaría genial tener una solución única e indiscutible para
poder ahorrar en nuestras compras, lo cierto es que no existe. Ahorrar resulta
complicado y sobre todo si analizamos nuestra mala costumbre: gastarnos el
dinero en cuanto lo recibimos. Es cierto el dicho ese de “dinero que entra fácil, se va fácil”. Pero lo triste es que, por
mucho que nos haya costado conseguir ese dinero, siempre encontramos
rápidamente algo en qué gastarlo.
La pregunta que debíamos hacernos antes de comprar cualquier cosa
es ¿realmente lo necesito?.
Tipos de compradores
Además, los consumidores pueden dividirse según el tipo de compra:
1.
Impulsivo: aquel que compra por impulso.
2.
Sugestionado: aquel
consumidor que se ve claramente influenciado por las acciones de marketing y
decide si compra o no en función de éstas.
3.
Planeado: aquel que
reflexiona antes de comprar. Antes incluso de realizar el propio acto de
comprar, ya sabe lo que va a comprar, para qué lo necesita y qué marca va a
elegir.
Algunos trucos que nos
permitirán ahorrar a la hora de comprar
Si bien hemos visto que ahorrar es complicado, no solo por
nuestros impulsos, sino también por las “trampas” que los propios
establecimientos nos ponen, existen algunos trucos que nos permiten disminuir
nuestras compras, en lo que a euros se refiere. En el caso del supermercado:
·
No se debe ir con hambre
nunca. Si vamos con hambre, nos apetecerán todo tipo de productos, y acabaremos
haciendo una compra interminable, que realmente no necesitamos hacer.
·
Si tienes hijos, nunca vayas
con ellos a la compra, acabarás comprando todo tipo de chucherías, patatas,
bollos… que no necesitáis ni tu ni ellos!
·
No cojas carrito a la entrada
del súper, ya que cuanto más grande es el “recipiente”, menos parece lo que nos
estamos gastando porque caben más y más cosas.
·
Lleva el dinero en billetes
grandes, procura evitar los pequeños ya que parece menos dinero y nos cuesta
menos gastarlo.
·
¡Las comparaciones son
odiosas! Ten cuidado con las comparaciones de precios. Si ves un producto caro
al lado de uno similar por un precio inferior, no quiere decir que el segundo
sea un chollo, sino que es un producto ancla.
A pesar de estos trucos, la dificultad del ahorro sigue siendo muy
grande. ¿Creéis que si los seguimos conseguiremos ahorrar bastante?
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